Si ya decidiste que tu opción para realizar el sueño de la casa propia es diseñarla y construirla de forma personalizada, y ya tienes el terreno en el que piensas emplazarla, es importante que consideres estos puntos.

- Primero que todo, te recomiendo que solicites un Certificado de informaciones Previas (CIP) de tu terreno en la Dirección de obras municipales de tu comuna. Con esta información, podrás conocer el conjunto de normas técnicas que deberá cumplir cualquier edificación en tu terreno. Este documento debes tenerlo junto con la escritura y otros documentos legales terreno, para cuando comiences el diseño.
- Establece el presupuesto máximo que tienes disponible para desarrollar este proyecto, de acuerdo a tu realidad económica, este es un punto muy relevante a la hora de acotar tu proyecto con un profesional.
- Define los lineamientos mínimos que requieres para tu vivienda, como por ejemplo la cantidad de dormitorios, baños, tipo de cocina, cuantos pisos, estacionamientos u otros, para tener una base por la que partir trabajando.
- Cotiza, pide referencias y compara al arquitecto u oficina de arquitectura que desarrollará tu proyecto. El arquitecto cumple un rol fundamental, ya que de su desempeño dependerá cuánto dinero y dolores de cabeza te puedas ahorrar en la etapa de construcción. Considera que es quien deberá darles vida a tus ideas y al mismo tiempo ponerle limites en base a tu presupuesto disponible, gestionar los permisos y administrar mejor los tiempos. Una vez tengas un comparativo, analiza tus opciones y selecciona la que más se acomode a tus necesidades.
- Con el diseño de tu proyecto ya desarrollado, tienes la opción de trabajar con un precio de construcción estimado en base a los m2 a construir, llamar a licitación a varios constructores para ver quien te entrega las mejores ofertas o solicitar un estudio de presupuesto detallado. Lamentablemente esta es una opción que no se utiliza mucho en Chile, pues se piensa que es un gasto innecesario, pero la experiencia ha demostrado que contar con este estudio nos permite negociar correctamente con quien sea el constructor de nuestro proyecto, pues no sólo te indicará los valores de precio unitario de cada una de las partidas que componen tu proyecto, sino otros valores que podrías no haber considerado, como los empalmes a los distintos servicios (sanitario, eléctrico, gas, u otro), distintas alternativas de materiales, en caso de que necesites optimizar el valor que estas obteniendo, entre otras opciones.
- ¡Y, finalmente, a comenzar con la ejecución de tu proyecto! Fíjate bien que, en cada uno de los tratos que cierres, exista un contrato o un acuerdo firmado entre las partes, que indique todos los puntos relevantes a tener en consideración en su desarrollo.